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¿Por qué los cabalistas
piden a todos y cada uno de nosotros estudiar la sabiduría de la
Cabalá?
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¿Qué es el alma? ¿Cómo
se desarrolla?
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¿Existe algo fuera de
nosotros o eso es simplemente una ilusión?
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¿Quiénes son los
cabalistas?
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¿Cómo es posible saber
quiénes somos, de dónde venimos y hacia dónde vamos?
En el punto 155, hacia
el final de la Introducción del Talmud Eser Sefirot (el
Estudio de las Diez Sefirot), Baal HaSulam (Rabí Yehuda Ashlag)
escribe: “Por lo tanto…debemos preguntar: ¿Por qué los cabalistas
obligaban a cada persona a estudiar la sabiduría de la Cabalá? En
verdad hay algo importante aquí, digno de ser publicado: hay un
magnífico e invaluable remedio…”.
¿Cuál es el remedio invaluable? Y él explica que todos tenemos un
alma. Y esta alma existe dentro de cada uno de nosotros en un estado
latente.
Para despertar el alma y abrirla, tenemos que desarrollarla para que
pueda absorber la Luz Superior que viene de arriba. La progresión
del alma es efectuada por la Luz Superior. La razón por la cual no
nos hemos desarrollado suficientemente hasta hoy es que no hemos
atraído la Luz Superior hacia nosotros.
Ahora, ¿qué método deberíamos usar para hacer esto? Mientras estamos
estudiando, especialmente durante las dos horas siguientes, nosotros
debemos esforzarnos por atraer la Luz Superior. Esto se logra de una
manera simple: no olvidando el por qué nosotros estamos estudiando y
cuál es el propósito de nuestro aprendizaje. No se trata sólo de
saber lo que está escrito y entender lo que estoy explicando, sino
vivirlo, alcanzarlo, sentirlo, trabajando dentro de nosotros, porque
sólo estamos hablando de lo que está dentro de nosotros.
Fuera de nosotros sólo existe la Luz Superior de arriba, el Creador;
y todo lo que nosotros somos capaces de imaginar –todo eso, está en
uno mismo.
Los mundos espirituales, este mundo, todo lo que podamos pensar,
absolutamente todo, se encuentra en nosotros mismos, dentro de
nosotros. Y si nos parece que existe algo fuera de nosotros mismos,
eso es simplemente una ilusión. Quienquiera que sea luego
recompensado y vea estas cosas desde los mundos de arriba, verá que
esto es en verdad así –que todo se encuentra dentro de un hombre.
Primero que todo: mientras estudie, piense que todos nosotros somos
un gran grupo que es uniforme y especial. Tenemos un gran deseo, una
gran vasija, a través de la cual atraemos una gran Luz Espiritual.
Yo estoy aquí para hacer posible que este proceso se materialice, yo
lo apoyo, lo estoy haciendo por usted, y usted debe esforzarse por
crear una atmósfera placentera y confortable para todos nosotros
juntos.
Es importante saber que estamos a punto de recibir un gran poder
desde Arriba, un poder que nos ayudará a progresar y a subir la
escalera espiritual. Luego usted lo sentirá y lo verá. Esto es más
importante.
Adicionalmente, yo no usaré ningún libro específico y le diré cuales
son mis fuentes. Pero, en realidad, no es importante de dónde
proviene esto. Mi propósito es darle bases, y cada vez usaré algo de
diferentes lugares en los libros.
¿Cómo nosotros adquirimos el conocimiento que usted está aprendiendo
con estas lecciones?
Nosotros lo aprendimos de personas como nosotros, que vivían como
nosotros, en este mundo, y de repente algo más alto que este mundo
les fue revelado a ellos. Comenzaron a ver a través de las paredes,
a través de la gente, a través de donde ellos estaban viviendo –dentro
de cuevas, en carpas, incluso palacios. Empezaron a ver algo fuera
de este mundo y comenzaron a escribir todo cuanto ellos veían y
sentían.
Comenzaron a medir este sentimiento, a examinarlo y constantemente a
analizarlo. En breve, ellos comenzaron a descubrir un mundo nuevo
completo fuera de este.. Lentamente ellos juntaron sus impresiones
en libros, los cuales se han convertido en las bases de la Sabiduría
de la Cabalá.
La Cabalá es llamada “la Sabiduría de la Cabalá” porque habla de la
revelación de la línea de Dios. Cómo recibir revelación del Poder
Superior y sentirlo, verlo y estar unido a Él. Eso es de lo que
ellos escribieron, y lo que nos han dejado.
¿Por qué escribieron? Primero ellos lo lograron y después lo
escribieron. Midieron, repitieron todas sus experiencias y,
realmente hablaron los unos con los otros a través de sus libros.
Sin embargo, sus escritos eran entendidos sólo por aquellos que
habían personalmente logrado el sentimiento desde el Mundo Superior.
Y estudiando lo que ellos escribieron, nosotros recibimos la Luz
Circundante. Mientras nosotros estamos pensando y esperando atraer
la Luz Circundante hacia nosotros, para disfrutarla, entonces con su
ayuda nosotros también podemos alcanzar un estado donde veremos como
ellos, una realidad más grande y superior. Y esta realidad nos
ayudará a saber quiénes somos, de dónde venimos y hacia dónde nos
dirigimos en el futuro.
Eso significa que estudiando la Sabiduría de la Cabalá y los libros
escritos por los cabalistas, podemos observar dos influencias: la
primera es que un cabalista está pasando su conocimiento a otro
cabalista, quien puede leer y caminar a través de los mismos lugares
en donde el autor ha estado –subir y bajar, exactamente como él- en
pocas palabras, realmente vivir y experimentar las mismas
situaciones descritas en esos libros.
La segunda influencia es sobre nosotros: por ahora la disfrutamos
como Luz Circundante. Sin entender lo que es, nos esforzamos por
atraer hacia nosotros el poder que nos mejorará y nos elevará hacia
las mismas situaciones que a los cabalistas.
Por lo tanto, vale la pena leer estos tipos de libros, los cuales,
en verdad tienen poderes especiales, grandes poderes. A pesar de que
hay muchos libros escritos acerca de la Cabalá, nosotros no los
leemos todos (hubo un gran número de cabalistas que escribieron en
toda clase de lenguajes y de muchas formas). Sin embargo, nosotros
tomamos libros especiales, escritos por gente del último nivel de
Corrección, de un nivel muy alto. Además, esos libros fueron
escritos especialmente para nosotros, para aquellos por debajo de la
Barrera y quienes están deseando sobrepasarla. Nosotros no tenemos
mucho de esos libros: los libros del Santo Arí, los libros de Ramjal
(cuyas escrituras todavía no estudiamos, porque escribió en un
lenguaje muy especial, al menos el lenguaje externo es escrito así),
y los libros de Baal HaSulam. |