Esta
charla es la primera de una serie de clases acerca de la Sabiduría
de la Cabalá. Entonces, ¿por dónde comenzamos? Empecemos con el
estado del hombre.
En
el transcurso de los miles de años de su desarrollo, ciertas
preguntas han intrigado al hombre. Estas son preguntas acerca del
significado de la vida. Tal como sabemos, aún a personas siglos
atrás le preocupaba estas preguntas de la misma manera en que esto
ocurre a cada uno de nosotros hoy en día.
Esta pregunta acerca del significado de la vida es la más difícil,
la cual surge en la persona durante su infancia. Probablemente nos
recordemos a nosotros mismos cuando teníamos seis, ocho, diez o doce,
cuando nos preguntábamos por primera vez: ¿Por qué se vive?, ¿para
qué se vive? Esas preguntas no despiertan en la persona por
casualidad. Después de todo, esta pregunta es sobre la existencia de
uno, y es originalmente inherente a la persona.
Si
la persona recibió educación de forma correcta
–una
establecida dentro de la sociedad que se percata del por qué se
vive, cómo vivir, qué meta se requiere que alcancemos, si en
realidad existe una meta para nuestra vida, y si la existencia de la
humanidad tiene una meta definida-
entonces la persona recibiría esta pregunta durante su juventud, y
posiblemente crecería de manera totalmente opuesta en comparación a
lo que vemos en nuestro mundo.
De
cualquier manera, habiendo fallado en encontrar una respuesta, nos
avergonzamos incluso de realizar la pregunta. Observamos a los
adultos y la manera en que viven, y continuamos arrastrando nuestras
vidas con dificultad. Nos olvidamos de la pregunta suprimiéndola,
debido a que no encontramos la respuesta.
Hoy en día, toda la humanidad se está haciendo la misma interrogante,
la cual se está expresando más intensamente por problemas con la
ecología, las drogas, crisis en la familia, en la educación, en
síntesis, en todos lados.
Igual que antaño, la humanidad no sabe la respuesta y prefiere
olvidarse de eso. Publicidad, televisión, radio, y todo tipo de
cosas existen para que evitemos pensar en esta pregunta. Incluso
prominentes activistas, cuyos trabajos los obliga a pensar en el
futuro de la humanidad, y acerca de la amenaza de la extinción
presente en el mundo, son incapaces de planear o pensar. Después de
todo, no saben cómo arreglar las cosas, desconocen el secreto de la
vida, y tampoco están concientes de la razón por la cual viven.
Esta pregunta aparentemente ingenua: ¿Para qué vivimos? está
tácitamente presente en todas las acciones del hombre, y
constantemente permanece a lo largo de nuestra vida exigiendo una
respuesta. Podemos decir que todo lo que el hombre logra en su vida,
y todo lo que intenta hacer es, ya sea hacerse esta pregunta para
revelarla y posiblemente encontrar una respuesta a ella; o callarla,
con el fin de evitar pensar acerca de eso, apartándose, como si no
existiera.
Así,
parece que no existiera, es mejor estar desconectado de ella, por lo
que esto quiere decir ya sea positivo o en negativo, siempre nos
referimos a ella, ya
sea que lo hagamos de una forma positiva o negativa, todos
expresamos nuestra relación con la pregunta:¿Para qué vivimos? Los
cabalistas formularon esta pregunta de una forma algo diferente:
¿Cuál es el significado de nuestra vida? Algunas personas son
capaces de huir de eso, otras no. En este caso, ¿quién tiene más
suerte? Depende de la sociedad y de la formación de acuerdo a la
cual actúa la persona. Básicamente, la aspiración y la relación
hacia esa pregunta está determinada por el estado interno del alma
de la persona, y por la presencia o ausencia de lo que la Cabalá
llama un
punto en el corazón
(Nekuda She BaLev) dentro del alma de una
persona.

De
acuerdo a ello,
la
gente se subdivide en aquellos que son incapaces de escapar a esta
pregunta, y aquellos que encuentran un escondite
en
diversos tipos de actividades. La relación a la pregunta acerca del
significado de la vida subdivide a las personas en las siguientes
categorías (la cual depende de dónde la persona encuentra este
significado): en dinero, placeres corporales, posición, poder,
ciencia o educación. Sin embargo, en cualquier caso, todos están
edificados con base a la misma pregunta: ¿Cuál es el significado de
mi vida?
Como dije antes, de una manera u otra cada uno es capaz de suprimir
esta pregunta durante la infancia. Sin embargo, después de
transcurrido un tiempo, de repente regresa, una y otra vez. Algunas
veces eso ocurre durante tiempos especialmente difíciles en la vida.
Luego preguntamos: "¿Por qué sufrimos?" De esta manera, a través del
sufrimiento de nuevo llegamos a la misma pregunta acerca del
significado de la vida.
Un
niño pequeño no sufre. Esta pregunta despierta en un niño de manera
natural. Un adulto que carga el peso de una familia, hijos, trabajo,
deudas, presión de la sociedad, publicidad, responsabilidades hacia
la sociedad (o siendo igual que todos), esta persona trata de evitar
sumergirse en sus preguntas. La sociedad lo obliga a ocupar cierta
posición; en el papel de padre de familia, como trabajador, como
amigo y como ciudadano... Una persona no tiene tiempo libre para
esta pregunta.
Somos nosotros mismos los que hemos organizado nuestra vida de tal
forma, a fin de "huir" de esta pregunta. Sin embargo, cuando los
momentos difíciles llegan, de cualquier manera la persona
pregunta:¿Por qué sufro? Esta es la misma pregunta que: ¿para qué
vivo?, excepto que una persona lo pregunta a partir de un estado en
el que se siente mal. En este caso también una persona ya sea que
trata de "huir" de esta pregunta o trata de recurrir a una serie de
metodologías que proporcionan tranquilidad, quizá recurren a
doctores... Es sabido que la enfermedad más diseminada en el mundo
hoy en día es la depresión.
Los jóvenes hoy en día han sido atrapados por una hola de drogas.
Por qué alguien necesita utilizar drogas a esta edad y desconectarse
de la vida? Después de todo, tiene todo un porvenir frente a él:
aventuras, disfrutar de los amores corporales. El mundo entero está
a sus pies, se le han preparado tantas cosas: juegos, posibilidades,
oportunidades. !Pero no!
Hay millones que están dispuestos a desconectarse de la vida y no
por la crisis material.
Los suizos ocupan el segundo lugar en suicidios. No todos tienen
éxito en deshacerse de sus vida: sólo uno de cada cuatro logra
suicidarse, sino ocuparían el primer lugar en el mundo. No podemos
decir que Suiza es una de las naciones que ha fracasado en lograr
suficiente desarrollo, y que no permite al hombre perfeccionarse a
sí mismo, y que no le da oportunidades de realizarse. Sin embargo,
las drogas y los suicidos están ocurriendo en la población joven de
la sociedad.
Esto
significa que nos encontramos ante un fenómeno en el que una persona
quiere salir de la vida incluso antes de que se le haya revelado.
Una y otra vez, esto respalda el hecho de que la pregunta: "¿Para
qué vivimos?", que despierta en nosotros aproximadamente a los seis
años, debe ser resuelta comenzando a esta edad y más tarde. De lo
contrario, la generación joven caerá en las drogas y en el suicidio.
No
es coincidencia que, al contestar la pregunta, "¿a qué edad uno
puede estudiar la Cabalá?" Rav Kook dijo: "Debe comenzar a estudiar
cuando quiera". Agra (el Gaón de Vilna) dijo: "Comenzando a los seis
años de edad". Después de todo, él mismo era ya un sabio a los nueve
años con respecto a las partes ocultas y reveladas de la Torá. A los
once años, comenzó a escribir libros acerca de la Cabalá. Sin duda,
estas eras personas especiales. Sin embargo, de cualquier manera,
esto significa que un niño es capaz de hacerse estas preguntas y de
encontrar la respuesta a la pregunta principal de la vida.
Cuando observamos lo que ocurre en el mundo, descubrimos que en el
transcurso de varios siglos, la humanidad se desarrolla y pasa de
pequeños deseos a unos mayores. Miles de años atrás la gente no
sentía un anhelo por las mismas cosas que desea en nuestros días; se
sentían satisfechos con cosas insignificantes. Sin embargo, en la
actualidad quieren más y más, hasta que finalmente alcancen el
estado en el que ya no deseen nada y quieran desconectarse, debido a
que este desarrollo no les ha traído nada.
Todos sabemos acerca de la crisis en la familia y la crisis en la
formación. Después de todo, no tenemos idea de cómo criar a la
creciente nueva generación. Si no tenemos la respuesta a la pregunta
-¿Para qué vivimos?- ¿cómo, entonces, seremos capaces de criarlos (o
educarlos)?
Cientos de años atrás, incluso cincuenta o cien años atrás,
criábamos a los hijos enseñándoles cómo establecerse en la vida. En
esencia, les enseñamos cómo "huir" de la pregunta acerca del
significado de la vida. Esto constituye toda nuestra formación. En
general, toda nuestra cultura y todo lo que hacemos en la vida
depende de nuestra relación con esta pregunta.
Hoy en día, ya no podemos hacerlo. ¿Por qué? Al fin de cuentas, no
tenemos ninguna respuesta para ellos, por lo que ocurre esta crisis
en la formación.
Si
la pregunta "¿Por qué vivo?" surge en ellos, entonces no tenemos una
respuesta directa a eso. Entonces, ¿Qué enseñan las escuelas?
Programas temporales reemplazan uno a otro anualmente. Todos están
felices, pero los problemas no se han solucionado.
Existe una crisis en la familia: la cantidad de divorcios
constantemente crece. En el pasado, una persona cuidaba de su
familia, y su tradición pasó de padre a hijo y de madre a hija. Un
hijo sabía que si su padre era un herrero, él también sería un
herrero. El legado familiar era traspasado de padre a hijo y de
generación en generación. La preservación de los lazos familiares
fue la base de la existencia. Sabemos acerca de esto por la
historia, y en novelas antiguas leemos acerca de cómo el árbol
genealógico estaba compuesto.
Actualmente, sin embargo, la comprensión mutua está ausente no sólo
dentro del núcleo familiar, sino también entre esposo y esposa.
Recientemente, observamos el fenómeno que la gente está comenzando a
ni siquiera importarle los hijos. La gente piensa: De alguna manera
nos estamos arreglándonos, y ellos también se las van a arreglar
solos de alguna manera. Todo el mundo está abierto, dejémoslos a
ellos tratar de alcanzar todo por sí mismos".
Y
realmente, los hijos se están separando de sus padres a una edad
cada vez más temprana, y ambos lados se sienten cómodos con esto,
como si un lado no tuviera obligación sobre el otro.
De
igual forma, la sociedad está construyendo un sistema de apoyo para
las personas de edad avanzada. Todo el mundo pertenece a la gente
joven, la cual recibe libertad desde temprana edad.
Todos estos fenómenos apuntan hacia dos aspectos: El "ego", o el
deseo de la persona de recibir continúa incrementándose. Sin
embargo, por sí mismo éste no encuentra la respuesta ¿Para qué y por
qué se desarrolla?
Observamos cómo la crisis se dispersa hacia todas las actividades
del hombre en este mundo. Digamos que cien años atrás los
trabajadores de la cultura fueron grandemente honrados. Buenos
músicos y artistas eran muy respetados. Reyes y jefes de gobierno
les dieron honores y organizaron recepciones en su nombre. Pero hoy,
¿a quién le importan? Es así porque nuestro deseo de recibir, o de
sentir placer al satisfacernos nosotros mismos es mucho más fuerte
que un cuadro bonito y de música bella; nuestro deseo es mucho más
fuerte que cualquier satisfacción que estas cosas puedan brindar. Ya
no los respetamos en la misma medida que antes. Hablo de la
humanidad en general.
Además, también hay personas que hacen justo lo contrario. Dicen que
oponernos a nuestro "ego" está destruyendo todo (como nuestras
familias e hijos, llevándolos a las drogas y empujando a las
naciones a la aniquilación masiva), que debemos preocuparnos por
relajarnos. Dicen que debemos usar metodologías que supriman
nuestros deseos egoístas y que nos calmen de diversas maneras, como
la meditación trascendental o la meditación regular. Hay personas
que tienen mucho éxito al hacerlo.
La
moda es pasajera. Posiblemente la industria de la cultura hindú
pronto será reemplazada por la china. De cualquier manera, el hombre
busca la paz. Sin embargo, cuando no hay salida, y es imposible
resolver la pregunta "¿por qué vivo?", entonces, de alguna manera me
relajo, pero lo hago sin sufrir. Pero, si mi pequeño deseo exige una
respuesta a esta pregunta "¿para qué vivo?-, entonces, encontraré la
manera de vivir más modestamente, o de alguna forma llegaré al punto
en que me sienta cómodo.
Nada
se puede hacer nada sobre esto; me voy a reducir de esta forma y
seré como un niño. Gracias a Dios, tengo salud y algo más, y me
satisfaré con esto.
En
el pasado, en el transcurso de miles de años, pensamos que el hombre
era bueno y que era la corona de la naturaleza o el pináculo de toda
la evolución. El hombre tiene mente y es capaz de cambiar la
naturaleza. Es la justificación de todo lo que existe debido a que
toma lo que se le ha brindado, trabaja con eso y lo usa de la manera
correcta. Revela las leyes de la naturaleza y las usa para
desarrollar la sociedad. A través de los siglos, ha existido la
seguridad que la humanidad alcanzaría prosperidad y que aprendería
cómo usar sus deseos correctamente, a pesar de toda su esencia
negativa.
La
ciencia y la cultura, la educación y la medicina, y todas las
actividades del hombre sobre la Tierra; todo debía llevar al hombre
a un estado en el que sería capaz de derivar placer de sus frutos.
Por miles de años la humanidad ha realizado esfuerzos en aras del
progreso, y de repente, descubre que el fruto está podrido, amargo.
El progreso, que a fin de cuentas tiene como finalidad el placer y la
satisfacción, por el contrario, trae muerte, abismo y oscuridad.
Estamos destruyendo la naturaleza. Tales catástrofes naturales están
ocurriendo y no sabemos qué pasará en un mes. No estamos hablando de
huracanes y tsunamis, sino de la aniquilación de la humanidad por
medio de cataclismos naturales. Ya sea debido al enfriamiento o al
calentamiento –es incierto exactamente cómo- pero los científicos
están pronosticando eventos naturales horribles y estremecedores
para el futuro. El problema no es lo que pueda pasar en algún
momento en el futuro distante. Al final de cuentas, es
incuestionable que la existencia del ser humano en la Tierra de
alguna manera llegará a su fin, debido a que todo evoluciona. Sin
embargo, estamos hablando acerca de unos cuantos años o incluso
meses; nadie sabe lo que va a pasar y cuándo.
Los cambios que está experimentando la Corriente del Golfo puede
llevar a un congelamiento de todo Europa, y las erupciones
volcánicas que se espera tomen lugar principalmente dentro de los
océanos pueden conducir a consecuencias mucho más destructivas que
si ocurrieran en algún lugar de África o los Himalayas, debido a que
lo que sucede en el océano amenazará con alterar el centro de la
Tierra.
En conclusión, nos encontramos en estados en los que nunca
estuvimos. Se hace cada vez más y más claro que todo el mundo es una
pequeña aldea, y que influenciamos uno a otro, no sólo por el hecho
que hemos llegado a una economía universal o a un terror global;
sino que realmente dependemos uno del otro en toda nuestra
producción, en la distribución de las actividades, en la adquisición
de petróleo, energía, y más.
Esta conexión es tan crucialmente integral que cualquier cambio en
el cualquier punto en el mundo inmediatamente causa un gran impacto
a través de todo el mundo. ¿Cómo podemos protegernos de todos estos
pequeños impactos, con el fin de evitar causar una reacción
universal? Esto no nos queda claro. Además, no sabemos qué ejerce
influencia y en qué, y de acuerdo a qué fórmula todos en el mundo
estamos conectados entre sí. Sin emabrgo, el hecho que todos estamos
conectados es obvio.
También hemos llegado a la revelación – y no desde el punto de vista
de la naturaleza, cuando una cosa es parte de otra- que si un bosque
es consumido en algún lado, otro cataclismo de repente ocurre en
otro lugar, tales como: huracanes, enfriamiento o calentamiento. No
experimentamos esto antes, pese a que también existía antes en
alguna medida. Sin embargo, ahora que hemos atado a toda la
humanidad en un solo nudo por medio del desarrollo económico, el
petróleo y los bienes de consumo, cada pequeña cosa incluye en todos.
El declive económico de un gobierno es suficiente para que todos
sientan una diferencia, debido a que todos dependen de la provisión
de cada país.
Nos estamos convirtiendo en un sólo organismo viviente que vive y
cubre todo el planeta. Este cuadro se hace más obvio y duro cada día,
y este organismo depende de todas sus partes.
¿Qué
hay acerca del terror mundial? La gente dice que esto no es
simplemente una cosa pasajera, que de alguna manera pueda ser
controlada o al menos disminuida en algún grado. En esencia, este
fenómeno es el motín del hombre con respecto a la misma pregunta:
"¿Para qué vivimos?" La gente que no sabe la respuesta establece
algunas metas para sí mismos (por ahora), y están seguros en su
interior que el logro de estas metas responderán a la pregunta
acerca del significado de sus vidas.
Por
lo tanto, están dispuestos a suicidarse, a vivir en condiciones
difíciles y a dedicar todas sus vidas a alcanzar alguna meta, porque
hay colocado esta meta como la respuesta a la pregunta: "¿Para
qué vivo?". Sin embargo, está claro que esta pregunta no es una
salida, y si encontraran la respuesta correcta, entonces, sin lugar
a dudas, la ola de terror disminuirá. De otra manera, no se calmará.
Vemos que durante todas las etapas del desarrollo del hombre ha
habido personas que se han hecho la misma pregunta acerca del
significado de la existencia, tales como pensadores y antiguos
filósofos. En esencia, las religiones también han surgido a fin de
responder esta pregunta de alguna manera. Todos los fundadores de
las religiones se hicieron la pregunta,
¿para
que vivimos?, y cada religión intenta contestar esto. Sin embargo,
el grado en el que esto falla es claro.
Independientemente de cualquier nivel del desarrollo que alcanzamos,
y a pesar de nuestros accesorios y de la cultura moderna, de todas
formas queremos presentarnos como seres que pertenecen a cierta
religión, o como personas que creen en una Fuerza Superior. Sin
embargo, esto está más relacionado con la cultura que con la
religión. Es como un club y no más que eso. Después de todo, si el
hombre sintiera que podría recibir la respuesta con la ayuda de la
religión, entonces actuaría de manera diferente y organizaría su
vida de forma distinta.
Sin
embargo, basándonos en el hecho que su comportamiento es cruel:
crisis en la familia, drogas, crisis en la formación -y esto es el
resultado de lo que está pasando en la religión- llegamos a la
conclusión que las religiones hoy en día son capaces de influenciar
al hombre. El hombre no es más una religión; la religión es
simplemente una parte de la cultura de la humanidad.
Y
el golpe más reciente que se agrega a las desilusiones de las
personas con respecto a la existencia en la Tierra por miles de años
es el golpe de la ciencia. La humanidad siempre ha tenido confianza
en la ciencia. La ciencia no es algo que pertenece al hombre sino al
mundo, ya que mientras más podamos conocerla, podremos utilizarla en
una manera mejor para nuestro bien. La ciencia en el pasado
pertenecía solo a gente especial, a sociedades cerradas, donde todos
los descubrimientos de la ciencia quedaban en secretos y había
descubrimientos grandes: los espejos, los explosivos, el papel y
toda clase de cosas.
En
general los principios de las matemáticas y de la medicina eran
ciencias muy preciadas para la humanidad, y por miles de años se era
cuidadoso con ella. Siempre había confrontaciones, entre la religión
y la ciencia, ya que a pesar de todo no se podía arreglar la una con
la otra.
Siempre habíamos pensado que por medio de la ciencia íbamos a poder
llegar al bien. Escribe Baal Ha Sulam “pero desde el momento que
los científicos empezaron a vender la ciencia por dinero”, es decir
cada uno recibió como alumno a cada uno, entonces ellos con esto
abrieron las puertas para todos, y de esta manera la ciencia salió
para la calle y cada uno empezó a utilizarla para adquirir dinero,
otros para adquirir bienes, para afectos, otros para control, honor
, guerra y toda clase de cosas, entonces la ciencia no viene para
ayudar al hombre, sino para ganar.
Ciertamente esta pregunta ¿La ciencia puede ayudar a la persona en
la vida? Podemos decir si, pero en la Biología desarrollamos toxinas,
venenos en la medicina. Nosotros podemos ver que mientras más
sabemos acerca de la persona, nos alejamos más y más de estar sanos.
Inclusive el desarrollo científico nos demuestra que no nos estamos
desarrollando por medio de la ciencia para mejorar la vida, lo que
es un golpe, pero en realidad, es un golpe de todos los golpes de
que la humanidad esta viendo que, de las ocupaciones de la ciencia
en la Tierra, estamos llegando al fin de la ciencia porque nosotros,
en los últimos cincuenta años podemos ver que, cada vez hay más
desarrollo de ella; pero por el contrario, lo que se suponía hasta
ahora que nos ocuparíamos más y más por mejorar la Tierra, sucede
que cuanto más nos ocupamos con cosas que sabemos, revelamos en la
interioridad cuánto no sabemos.
Por ejemplo, estamos descubriendo el universo y descubrimos que no
sabemos más que dos o tres por ciento de lo que está hecho, de esas
masas grandes de los gases, de todas esas sustancias, pero aparte de
eso, hay una energía que no entendemos, existe un material que no
podemos alcanzar que está oculto, una serie de cosas. Cada vez más
descubrimos que nos falta de orientación en este mundo.
Cuando se llega especialmente a la física quántica descubrimos cómo
nuestra percepción de la realidad es muy limitada, hasta que
finalmente empezamos a descubrir que nuestra percepción es solamente
dentro de nuestros cinco sentidos, que todos los instrumentos están
construidos de tal manera que no podemos descubrir algo que está
afuera de una manera objetiva. Tampoco podemos ver la realidad sino
sólo lo que se nos revela a nuestros sentidos. Sólo de una manera
subjetiva es lo que podemos percibir y también lo que nos parece que
no podemos percibir, eso también en realidad se revela en los
sentidos y en los instrumentos subjetivos internos nuestros. Todo
eso también lleva a la humanidad a sentirse más impotente, vacía y
desesperada de la realidad que hoy en día existe en el mundo.
En
el pasado podíamos tener un plan, un programa de gobierno, para una
nación que se desarrolla, cada país tenía un plan para cincuenta,
veinte, diez, cinco y un año. Así se hacían los planes y programas,
porque de otra manera no se puede ir hacia adelante y progresar;
digamos que necesitas en tantos años tal y cual energía, tienes que
empezar a construir centrales eléctricas para que dentro de diez
años, puedas activarlas y así proyectas lo que necesitas dentro de
treinta años. Quieres tener científicos, tienes que abrir lugares
para prepararlos. Sabemos el tiempo que requiere preparar un
científico, toma más de treinta años, etc.
Hoy no existe esto, porque hoy en día la persona que termina la
universidad tiene que completar otros estudios y después debe seguir
cada vez más perfeccionando su profesión, porque la preparación para
su profesión no termina, todo el tiempo se desarrolla, todo el
tiempo tiene que trabajar mejorándose así mismo. Antes, en el pasado
uno terminaba la universidad veinte, treinta años; uno trabajaba con
la misma instrucción que recibió de la Universidad y eso era
suficiente, o a lo mejor leía novedades una vez cada dos años, no
necesitaba más.
Hoy en día es muy distinto, por ejemplo, las computadoras toda la
gente dice que por más que trabaja en ellas, tiene que aprender y
estudiar todo el tiempo y sin eso es imposible.
Se
puede decir que estas cosas traen a la persona a sentirse impotente
y los países, como les dije antes, hacían planes para cincuenta años
adelante ya que sin esto era imposible que se desarrollara. Hoy en
día no se puede hacer nada, apenas se puede implantar un plan para
unos pocos años adelante y aún esto también cambia, vamos a un
estado de falta total de control en nuestro mundo y en nuestra vida,
precisamente cuando pensábamos que tendríamos un control absoluto
sobre la vida en el mundo, sobre lo que íbamos a ser.
Así que el sentido de esa pregunta ¿para qué vivo? No es una
pregunta de una persona, sino que una pregunta de toda la humanidad
que llega reiteradamente de vuelta a una persona. Uno se siente
entre todos y dice, "bueno a lo mejor es un infortunio de los ajenos,
es la mitad del consuelo, como todos, a mí también me pasan cosas. ¡Que
vamos hacer entonces, las seguimos cargando!?".
Pero también, por otra parte, de todos modos esa desesperación
general que existe en el mundo, la incapacidad que existe, nos tiene
que traer a enfrentar esa pregunta eterna y parece que vamos a poder
descubrir la respuesta.
¿Cómo
y dónde podemos del todo recibir esa respuesta? Si es que existe. A
lo mejor la persona vive, muere y no hay nada aquí como respuesta
para su vida, se vive porque se vive.
La
respuesta debe ser precisamente compuesta de esas dos condiciones:
por un lado, desilusionado porque no tenemos la respuesta , nosotros
debemos encontrarla descubrirla, y por otro lado, por todos los
asuntos que tenemos en este mundo precisamente por ellos y con su
ayuda hemos llegado a un estado que podemos entender un poco a la
naturaleza y podemos ver un poco que de toda ella realmente el que
se desarrolla es el hombre, el ser humano; y si él se desarrolla,
por medio de las investigaciones de la naturaleza -entendiendo que
esta se desarrolla por un causa, esa causa-, esa razón también está
incluída en esa meta final que existe ya en la razón principal desde
un principio y por ello se desarrolló. Eso quiere decir en
realidad que el desarrollo que tenemos hoy, lo que nos dice la
física cuántica acerca de nuestros genes, nos indica que la
naturaleza nos proporciona nuestro desarrollo con un propósito.
Lo
que nos entrega la naturaleza es que nos informa lo referente a la
Creación y lo trae en una evolución gradual hacia el estado deseado,
como vemos por ejemplo en una manzana cuán amarga, dura y fea es
durante su tiempo de desarrollo y que sólo es buena comérsela cuando
está madura. Así es cada criatura y cada célula que se desarrolla,
porque antes que exista el principio del desarrollo, hay designio,
un plan dentro de la célula; dentro del objeto que se está
desarrollando existe la imagen final, el estado final en potencia al
cual debe llegar, y por eso investigamos y podemos ver la
naturaleza y por eso es que si descubrimos a la naturaleza
correctamente ahí también existe la respuesta para nuestro
desarrollo.
Si
nosotros nos desarrollamos de estados tan amargos como esa manzana y
puede que al final va a ser el estado contrario a la madurez al
estado al cual podemos llegar, la única pregunta es si nosotros nos
desarrollamos de una manera obligatoria, si la naturaleza nos obliga
de repente.
La
humanidad tiene deseo de desarrollar la ciencia, la educación, la
cultura, a otros control, riquezas, poder, tener impulsos, y así nos
desarrollamos durante miles de años ¿o qué?, ¿hay aquí alguna
participación personal privada en todo este proceso?; es decir, la
cuestión es !siéntate, no hagas nada porque al final se te va a
revelar?, o puede ser que si no vamos a participar, descubrir o
revelar, puede ser que suframos mucho por los estados por los cuales
vamos a pasar y esos estados nos van a traer al final del desarrollo
bueno en el cual vamos a ver que al final encontramos algo positivo
o que este desarrollo en la última fase demanda de todas maneras de
la participación del humano. Porque el hombre que se ha desarrollado
en su mente y sus emociones para ser el grande, libre para entender
la realidad, no es que la naturaleza nos haya traído tales
instrumentos grandes para desarrollarnos, más parece que debemos
participar en una forma cognitiva consciente real; de todo esto
vamos a tener que tratar y hablar de eso.
Ciertamente por la ciencia podemos ver que en cada célula hay un
desarrollo gradual de causa y efecto, y no puede ser que haya un
estado siguiente sin que haya uno primero (comienza a hacer un
gráfico) Hay un estado uno y un estado dos que no se puede
desarrollar así no más. La célula, la persona, o cualquier objeto
que está en estado de desarrollo tiene que descubrirlo en su estado
uno, ya sea que no lo ha realizado o que no le va bien, tiene que
llegar al estado número dos, y ese deseo que lo quiere hacer llegar
al estado número dos le hace saltar a un estado más grande y así lo
hace desarrollar de un estado a otro estado más alto; es decir, el
desarrollo es gradual en causa y efecto, y es en eso que se revela
que el estado actual es malo y el que sigue es mejor.
Así también nos desarrollamos las personas, como humanidad sobre la
Tierra, y cada vez que nos desarrollamos, vemos que esto es muy
bueno pero puede ser mejor, así venimos cambiando la sociedad, la
relaciones entre nosotros, las relaciones sociales mundiales, y
empezamos a meter nuevas cosas en nuestra vida, que es el resultado
del desarrollo de las enseñanzas, de la ciencia, de la cultura; es
decir, la persona empieza a actuar en forma gradual de acuerdo a las
ausencias que descubre. Que vale la pena que estoy cansado de mis
muebles, los cambio; es decir, que mi estado actual no es bueno y
hay un estado mejor, digamos que de esta forma hay desarrollo; es
decir, en una forma gradual este estado mejora.
Entonces, cuando vemos ese desarrollo cómo va pasando sobre nosotros
y cómo pasa por las células vivas, quedamos solamente con la
pregunta ¿de todas las leyes de la naturaleza del inanimado,
vegetativo, el animado, a todos yo los puedo investigar, los puedo
entender hasta cuanto es posible; pero de todas maneras, solamente
el nivel del hablante, nivel del ser humano, no su cuerpo, sino que
su psicología, su forma de pensar, sus propósitos, todas esas cosas
que son más altas en la parte de su exterior, allí no sabemos, no
entendemos y no tenemos ninguna posibilidad de abrir y de alcanzar.
Aquí hay una pregunta ¿es que realmente no podemos ver eso porque
estamos en ese nivel ya sea inanimado, vegetativo, o hablante?
Cuando yo en el nivel del hablante investigo la naturaleza en sus
distintos niveles yo los veo desde arriba de mi mente, de mi
percepción, de mis sentimientos de mi entendimiento en una ciencia
que yo me desarrolle en el nivel del hablante, pero en otras formas
más bajas que yo de la naturaleza las puedo investigar y entenderlas
y controlarlas. Puedo insertarlas en alguna investigación, darles
algunas influencias porque todo lo que aprendo es como la caja negra,
porque antes de eso, al principio no sé lo que es, doy una
influencia, recibo una respuesta y después de muchas influencias y
muchas reacciones ya tengo de acuerdo a eso una fórmula, que es
probablemente ese objeto que estoy estudiando, así es cuando yo me
refiero de tal manera al inanimado, vegetativo, animado, entonces lo
puedo entender; es decir, yo puedo al final entender cuál es su
propósito hasta que todo me sea claro, yo lo entiendo aunque no
puedo investigarme a mí mismo, a mi hablante, no los otros niveles
que existen sino que mi nivel de hablante.
Aquí surge otra pregunta ¿es que esto se me negó a mí? Entonces, no
hay propósito en la naturaleza, porque todo se desarrolla del
inanimado, vegetativo, animado, sino aún más que eso?, ¿o hay algún
resultado? En este momento no veo la razón, no veo el propósito, no
veo la causa, no veo el para qué, incluso de la ausencia de causa.
Parece que para investigar el hablante tenemos que subir a un nivel
más alto que se llama espiritualidad, superior a mí; entonces,
estando en ese nivel me puedo investigar a mí mismo, si existe ese
nivel y parece que sí existe, porque estamos descubriendo por medio
de la ciencia moderna que no solamente nosotros estamos conectados
como humanidad como un cuerpo sobre la Tierra, sino que se nos dice
que todas las leyes de la naturaleza están conectadas junto a una
única ley que abarca toda la realidad.
Una ley, y nosotros dentro de ella; es decir, todo el universo, la
Tierra, los cuatro niveles que existen, todos están bajo esa única
sola ley, que rige a muchas otras leyes especificas que nosotros
estudiamos en las ciencias como la biología, física, la química, la
medicina. Pero la ciencia nosotros la habíamos dividimos de tal
manera u otra para así investigar, pero en realidad era una sola
naturaleza. Entonces, nosotros cuando aprendemos y estudiamos la
naturaleza por medio de todas esas ciencias, nos damos cuenta no que
esto es biología, química, biología, sino que todas se conectan en
uno y que no hay diferencia de las leyes , sino que nosotros así las
estudiamos, pero al final nos damos cuenta que todo se conecta en
una ley que actúa sobre nosotros y solamente hacia nosotros, y así
sentimos influencia de todos los lados.
Como nosotros estamos divididos en cuatro niveles sentimos sobre
nosotros alguna división en la influencia sobre nosotros, pero es
solamente como nosotros lo sentimos, porque estamos cubiertos de
muchas capas, pero la ley es única, entonces surge otra pregunta: ¿Cómo
vamos a saber esa única ley que existe y que actúa en todo el mundo
que parece que mueve y que afecta a todo, activándolo en forma
especial a nosotros como en los procesos de la fruta que madura del
inanimado a la vegetativo, a animado y hablante? y ¿cómo nos trae a
este estado que empezamos a preguntar todo sobre la vida, el cual es
el nivel en el cual permanece la humanidad hoy en día? y como
nosotros hablamos que la persona que llega de un estado a otro
decimos que sube del estado uno al estado número dos sólo con la
condición de descubrir que el número es un estado. Entonces ahora
estamos descubriendo que en nuestro estado actual nos va mal y que
no tenemos dónde más desarrollarnos y precisamente esta pregunta nos
va a traer a un desarrollo más alto.
Por ello no debemos escaparnos de la pregunta, sino al contrario,
debemos clarificarla, buscarla, y después buscar la respuesta
correcta. Hasta hoy todo lo que enseña la humanidad en todos sus
negocios y en todo es cómo escaparse de la pregunta ¿para qué se
vive? Hoy en día hay supuestamente dos reacciones:
1) Que la reprimimos por medio de las drogas, suicidio, desesperación
general, crisis general, ¿hasta cuándo?
2)
O que tenemos un remedio, una respuesta
En
realidad lo que yo quiero decir aquí hoy en día es que todos
enfrentamos esta gran pregunta al unísono, ¿para que existimos?
Porque allí si vamos a encontrar respuesta, nuestra existencia va a
seguir, todo va a salir bien, sabiendo las leyes de la naturaleza y
conduciéndonos por ellas, de esa manera saber usarlas correctamente,
sino lo vamos a saber nosotros en forma individual y toda la
humanidad va a tener que entrar a buscar otros métodos para
olvidarse una y otra vez de la respuesta a esa pregunta y eso nos va
a traer una y otra vez golpes más grandes.
Por eso es que nuestra posición ante esa pregunta es un estado muy
especial y se puede ver que es un estado que nos trae a un
desarrollo a nivel más superior por encima del inanimado, vegetativo,
animado y hablante, llegando a un nivel superior, y si nosotros
vamos a persistir en no querer abrir los ojos, no vamos a querer
descubrir la respuesta, parte de nosotros va a llegar al nivel de
animado, vegetativo o inanimado, es decir, o se va reprimir por toda
clase de métodos, o nos vamos a suicidar, y al final, así de todas
maneras vamos a sufrir hasta que esta ley general nos obligue a
resolver la pregunta: ¿Cuál es el propósito de nuestra vida? Así es
que con eso concluimos nuestra charla . Muchas gracias. |